para ser jefe scout hay que estar un poco loco

 soy jefa y no tengo vacaciones!!!

Es de algo de lo que se quejan todos los empresarios, y no se porqué, yo soy jefa y no tengo vacaciones. Pero por suerte soy jefa, pero no de una gran empresa, soy jefa de algo mucho más valioso, soy jefa scout, responsable de 60 chavales.

60 chavales que a veces hacen caso y otras no, 60 chavales que a veces  se comportan bien y otros días nos sacan de quicio,  60 chavales con sus cosas buenas y sus cosas malas, 60 chavales con sus problemas y sus alegrías, 60 chavales que aprenden y disfrutan del fruto de mi trabajo.

 Sí trabajo, además más horas de las que debería ,pero no cobró un duro, gano algo mucho más valioso.

Invierto. Invierto tiempo, el que tengo y el que no. Invierto mi tiempo libre y lo hago porque quiero, no me quejo. Puede ser que desde que soy jefa vea a mis amigos (no scouts) algo menos, pero creeme que a mis amigos scouts, compañeros de “oficio” les veo más de la cuenta. Puede ser que cada vez me siento menos en el sofá, pero lo  cambio por más acampadas, reuniones , salida, cafés. Puede ser que desde que soy jefa casi no pise por casa, pero de esto no solo es culpa de los scouts, es mi culpa y  el querer estudiar en las bibliotecas. Puede ser que desde que soy jefa al montarme al autobús deje de pensar en musarañas y me paso los viajes pensando actividades, dinámicas y juegos para impresionar a estos tormentos, perdón TROPEROS.

¿Y por que lo doy? Os preguntareis algunos…

No doy nada extraordinario, solo tiempo y pensamiento. ¿Y recibir? Tengo suerte de que sembrando aquí, salga un cosecha tan abundante y de tan buena calidad. Tengo suerte de estar acompañada en esta tarea, tengo suerte de no ser la única loca que quiere dar sus tiempo a otros a cambio de disfrutar y hacer que otros disfruten del escultismo.

Siempre supe que el “trabajo” de jefe scout no era fácil, lo supe desde antes de meterme en este berenjenal pero ahora que lo vivo en primera persona puedo asegurar que el trabajo en si, no es difícil. Lo difícil es esperar, esperar a que tu trabajo de su fruto. 

Si mi trabajo fuese algo normal, con un horario, unas pautas que seguir, un sueldo, yo sabría que a fin de mes tendría mi nómina como recompensa. Pero el problema es que mi trabajo no es nada convencional, trabajo educando en valores, educando personas, y por tanto mi mayor recompensa es ver evolucionar , ver crecer aquellos pies tiernos que un día pisaron la base por primera vez.

Mi trabajo no es nada convencional, y mis compañeros tampoco son normales. Son personas extraordinarias con vidas muy normales y ocupadas. Y no solo hablo de mis compañeros de kraal, de mis compañeros de grupo, hablo de cualquier jefe/responsable/monitor, cualquier persona que dedique algo de su tiempo a enseñar y educar a otros en los valores del ESCULTISMO.

En el fondo nos da igual los colores de nuestras pañoletas, a pesar de la  “rivalidad”   entre grupos, todos trabajamos por un objetivo común.

GRACIAS A TODOS ESOS MAJARETAS QUE TRABAJAMOS PARA DEJAR EL MUNDO MEJOR DE COMO LO HEMOS ENCONTRADO.

Se que sí que se os a gradece a veces vuestro esfuerzo, pero nunca esta demás GRACIAS

                                    

                     

1scoutcualquiera